Situado en el Valle de La Orotava, al norte de la isla de Tenerife, Los Realejos es un municipio con muchos atractivos para los visitantes. Además de estar cerca de Puerto de la Cruz, la cuna del turismo tinerfeño, la localidad cuenta con unas magníficas playas, como las de El Socorro, Castro y La Fajana, que se pueden disfrutar durante todo el año aprovechando el maravilloso clima canario. También dispone de un interesante patrimonio artístico, tanto civil como religioso.
Los Realejos es muy apreciado por los amantes del turismo rural y de la naturaleza, siendo un excelente punto de partida para numerosas rutas senderistas y excursiones al Parque Natural de la Corona Forestal y al Parque Nacional del Teide, Patrimonio de la Humanidad y la reserva natural más visitada de Europa.
A continuación te mostramos algunos de los lugares que ver en Los Realejos durante tu visita a Tenerife.
Rambla de Castro
Un espacio natural protegido de alrededor de 50 hectáreas de extensión que destaca por sus impresionantes paisajes y su rica biodiversidad. Durante un recorrido por la Rambla de Castro podrás contemplar sus amplios palmerales y numerosos exponentes de la flora autóctona, como tajarales, tajinastes y dragos. Puedes hacerlo siguiendo la conocida Ruta de la Rambla de Castro, de apenas dos kilómetros y con un escaso desnivel, que empieza en el Hotel Maritim y concluye en el Mirador de San Pedro.
Pero la Rambla de Castro no solo posee un alto valor paisajístico, también te permite descubrir interesantes edificaciones, como la Casona de los Castro, del siglo XVI, la Ermita de San Pedro, del mismo siglo y cuyo interior alberga una talla barroca del apóstol, y el Fortín de San Fernando, una fortaleza dieciochesca de la que te hablaremos a continuación.


Fortín de San Fernando
Uno de los edificios más emblemáticos de Los Realejos y una visita ineludible durante tu recorrido por la Rambla de Castro. Es posible que la primera vez que contemples esta fortaleza defensiva del siglo XVIII sientas una especie de déjà vu, es decir, la sensación de que ya has estado en este lugar en otra ocasión. No te preocupes, no es ningún fenómeno paranormal, lo que ocurre es que el Fortín de San Fernando es tan fotogénico que ha sido utilizado como escenario en numerosas producciones cinematográficas, como Moby Dick y la saga de James Bond.
La fortaleza fue construida como baluarte defensivo frente a los numerosos ataques piratas que sufría la localidad durante los siglos XVIII y XIX, entre los que destacan los realizados por el sanguinario Ángel García, apodado Cabeza de Perro, oriundo de la isla y cuya carrera delictiva concluyó en un cadalso de Santa Cruz.
La tronera del fortín conserva tres de sus cinco cañones originales. No solo merece la pena visitar la fortaleza por su valor histórico, también por las impresionantes panorámicas que ofrece de la costa y los palmerales.
Playa de El Socorro
Uno de los mejores arenales de Tenerife, especialmente para los amantes del surf, con unas estupendas olas sobre las que deslizarse. Con todos los servicios, la Playa del Socorro cuenta con un snack-bar, ideal para tomarse unas cañitas y unas tapas mientras se disfruta del sol y las vistas, además de una zona de entretenimiento juvenil con juegos y lecturas llamado El Puntito del Socorro.
Con una extensión de alrededor de 440 metros de largo y 60 de ancho, tiene un fácil acceso en coche por un desvío cercano al Mirador de San Pedro, en la carretera C-820, y un amplio aparcamiento.
Eso sí, es recomendable que tengas precaución con el oleaje y las corrientes porque muchas veces el mar está realmente bravo (de ahí que sea un lugar de peregrinaje para surfistas).


Barranco de Ruiz
El Barranco de Ruiz es un espacio natural declarado Sitio de Interés Científico por la riqueza de su flora y su fauna que se extiende por el municipio de Los Realejos y de la vecina localidad de San Juan de la Rambla.
Con casi 100 hectáreas de extensión, su interior alberga una completa zona recreativa que dispone de mesas y asientos, zona infantil, barbacoas y baños; un lugar perfecto para pasar el día en compañía de familia o amigos, ya sea con tu propia comida o degustando los menús de los numerosos restaurantes que hay en las cercanías.
La zona recreativa también es el punto de partida de numerosos senderos. Tienes parking para el coche y parada de guaguas (puedes acercarte hasta el Barranco de Ruíz mediante las líneas 108 (entre Santa Cruz e Icod de los Vinos) y 366 (entre Puerto de la Cruz y Buenavista).
Mirador de La Corona
Uno de los santuarios europeos para los amantes del parapente y el vuelo libre. Situado en una cima del Macizo de Tigaiga, a unos 750 metros de altitud, cuenta con unas condiciones atmosféricas excepcionales para la práctica de estos deportes de riesgo (tiene instalada una pista de despegue), así como unas espectaculares vistas del Valle de La Orotava.
Por otro lado, desde La Corona parten numerosas rutas senderistas, así que es un lugar ideal para una buena excursión.
Mirador de El Lance
Otro mirador con unas maravillosas vistas al Valle de La Orotava y a los municipios de Los Realejos, Puerto de la Cruz y La Orotava. Se encuentra en la carretera que une a Icod el Alto con Los Realejos y dispone de cafetería y terraza desde donde puedes disfrutar del paisaje mientras te tomas un tentempié.
Además de las panorámicas, el Mirador de El Lance cuenta con el atractivo de una gran escultura de bronce erigida en honor al caudillo guanche Mencey Bentor, quien, tras ser derrotado por las tropas castellanas en el año 1495, prefirió suicidarse despeñándose desde el lugar que ahora ocupa el mirador antes que rendirse.
El Mirador de El Lance dispone de aparcamiento, parada de guagua y acceso para personas de movilidad reducida.




Casa de Viera y Clavijo
La casa natal del sacerdote, escritor, historiador y biólogo José de Viera y Clavijo, el más conocido intelectual de la Ilustración canaria, oriundo de Los Realejos y que vivió entre 1731 y 1813, se encuentra en la localidad que le vio nacer, concretamente en la calle que lleva su nombre.
La importancia de Viera y Clavijo es tal en la cultura de las islas que cada aniversario de su fallecimiento, el 21 de febrero, se celebra el Día de las Letras Canarias.
La Casa de Viera y Clavijo tiene la declaración de Bien de Interés Cultural desde el año 1986. Solo se conserva la fachada original de la vivienda, estando su interior totalmente reformado. La vivienda cuenta con dos plantas y en el exterior se puede ver una placa conmemorativa del sacerdote.
Hacienda Los Príncipes
Otra de las construcciones civiles más emblemáticas de Los Realejos es la Hacienda Los Príncipes, construida por orden de uno de los conquistadores de la isla, el Adelantado Alonso Fernández de Lugo, representante de la Corona de Castilla, en el siglo XVI. Las edificaciones que puedes contemplar actualmente son de los siglos XVII y XVIII, cuando la hacienda fue totalmente reformada.
La finca recibe el nombre de Hacienda Los Príncipes por la boda de la sobrina del Cuarto Adelantado, Porcia Magdalena de Lugo, con Antonio Luís Leiva, Príncipe de Asculi.
La hacienda constituía la principal explotación agrícola de Los Realejos y a su alrededor se produjo el crecimiento urbanístico de Realejo Bajo, el núcleo poblacional más importante del municipio a nivel artístico, donde se eleva la Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción y numerosas viviendas con la arquitectura típica canaria.
El conjunto incluye la ermita y la plaza de San Sebastián, diversas casas de trabajo, lagares, caballerizas, molinos y dependencias para huéspedes. El interior de la finca está rodeada de frondosos jardines, con estanques y fuentes, como la fuentecilla de La Gota.
Este Bien de Interés Cultural se encuentra en la Calle Los Molinos y el Camino de Icod el Alto.
Iglesia de Nuestra Señora de la Concepción
Situado en Realejo Bajo, es uno de los templos más importantes de la localidad. Su construcción se llevó a cabo entre los años 1697 y 1701 en el terreno que ocupaba una antigua ermita.
Aunque en su momento albergó grandes tesoros artísticos como retablos neoclásicos, artesonados mudéjares y lienzos del pintor Hernández de Quintana, un trágico incendio acaecido en el año 1978 acabó con una buena parte de su patrimonio.
En la actualidad puedes admirar en su interior las imágenes de La Dolorosa y de Nuestra Señora del Rosario, ambas del siglo XVII e interesantes piezas de orfebrería, como una cruz procesional del siglo XVI y una custodia franciscana del siglo XVIII.
Desde su reapertura en 1993, la iglesia está abierta al culto.
Iglesia del Apóstol Santiago
La parroquia Matriz del Apóstol Santiago se encuentra en el conjunto histórico de Realejo Alto y tiene la declaración de Monumento Histórico Artístico Nacional. La iglesia es una de las primeras, o tal vez la primera, que fue construida en Tenerife, habiendo sido fundada en el año 1496.
A lo largo de los siglos fueron añadiéndose nuevos elementos a su arquitectura, como su icónica torre, añadida al conjunto en 1714, o el cuerpo adicional de su fachada, obra del siglo XX.
En su interior puedes admirar los retablos de Santa Bárbara y de la Misericordia, obras de Pedro Duque Cornejo y Antonio Álvarez, respectivamente, así como diversas tallas, como las de san Francisco, Santa lucía, San Isidro Labrador y Nuestra Señora de los Dolores.


Santuario de Nuestra Señora del Carmen
Terminamos nuestro recorrido por los lugares más emblemáticos que ver en Los Realejos en el santuario mariano más importante del norte de Tenerife: el Santuario de Nuestra Señora del Carmen. Aquí se rinde culto a la Patrona del Valle de La Orotava desde su fundación en el año 1965 (con anterioridad los terrenos albergaban el Convento de San Andrés y Santa Mónica, pero fue destruido en otro incendio en el mes de febrero del año 1952).
Desde el año 1999 el templo tiene la consideración de Bien de Interés Cultural. En su exterior puedes admirar su espectacular campanario de cubierta cónica, mientras que en su interior brilla con luz propia la talla de la Virgen del Carmen, del siglo XVII, obra de Antón María Maragliano, además otras interesantes imágenes, como las del Señor de Huerto y la de San Andrés Apóstol, del siglo XVII, y la de San Agustín de Hipona, del siglo XVIII.
La de Los Realejos es una escapada imprescindible para cualquier visitante que quiera disfrutar de un entorno rural y costero lleno de encanto, con numerosas playas y rutas senderistas, y muy cerca de los principales espacios naturales protegidos de Tenerife. Por si fuera poco, puedes completar tu recorrido por las mejores muestras del patrimonio arquitectónico y artístico de la localidad disfrutando de la deliciosa gastronomía canaria en alguno de los muchos y magníficos restaurantes de la zona.
Otros lugares que ver en el Norte de Tenerife
- Qué ver en Tenerife
- Qué ver en Puerto de la Cruz
- Qué ver en La Orotava
- Qué ver en Garachico
- Qué ver en San Juan de la Rambla
- Qué ver en Santa Cruz de Tenerife
- Qué ver en La Laguna
Actividades y excursiones en el Norte de Tenerife