Las papas arrugadas son uno de los platos más típicos y conocidos de la gastronomía canaria y que adopta este nombre porque, después de ser hervidas con mucha sal, la piel adopta este aspecto característico.
Las papas que utilizaremos para esta receta son las papas bonitas, entre las que podemos encontrar las famosas papas negras, que son típicas de Tenerife. Eso no significa que no podamos hacerlas con otra variedad más pequeña.
Receta de papas arrugadas con mojo
Lo primero que haremos será preparar el mojo picón, con el que bañaremos posteriormente nuestras papas arrugás.
Ingredientes para el mojo picón:
- 1 cabeza de ajo (8 dientes aproximadamente)
- 2 pimientas piconas o cayenas grandes
- 1 cucharadita de comino en grano o molido
- 1 cucharadita de pimentón dulce o picante
- Vinagre 20 ml
- Aceite de oliva virgen extra 150 ml
- Sal gorda (al gusto)
Elaboración:
Pelamos los ajos y los pasamos por el mortero, debemos hacer lo mismo con el comino si lo vamos a utilizar en grano, después quitamos las pepitas de las pimientas y las añadimos junto con la sal gorda hasta que el resultado sea una pasta homogénea, pero suave.
Ahora que tenemos la pasta, debemos ir añadiendo el pimentón y poco a poco el aceite de oliva, lo que debemos encontrar es una pasta más espesa. Si nos hemos pasado de espesor, podemos aligerarla con un poco de agua.
En el caso de que no queramos utilizar el mortero, podemos utilizar la batidora, para ello agregamos todos los ingredientes y lo trituramos hasta que obtengamos una pasta que se asemeje a un puré ligero.
Elaboración de papas arrugás:
Lavamos las papas muy bien y las introducimos dentro de una cazuela grande junto a un litro de agua caliente. Añadimos más agua (caliente) si es necesario, hasta que casi cubramos las papas. Añadimos un puñado generoso de sal gruesa por cada kilo de papas.
Le damos potencia al fuego (sin tapar la cazuela) hasta que el agua se haya evaporado casi por completo. Para saber si ya tenemos las papas arrugadas al punto, podemos pincharlas con un tenedor y si entra y sale sin resistencia, entonces están al punto.
Cuando veamos que solo queda un cuarto del agua, debemos menear constantemente la cazuela para que la sal se integre y la piel se arrugue hasta que no quede nada de agua.
Presentación:
Si vemos que las papas arrugadas están ya en su punto, pero sigue quedando agua, retiramos el exceso y las dejamos reposar sin tapar. Lo único que tienes que hacer es servirlas calientes con el mojo picón a temperatura ambiente y mezclarlo todo bien.