Resulta complicado no andar por Tenerife y encontrarte una maravilla a cada paso. Una de esas maravillas de la naturaleza que se puede disfrutar es el Charco del Viento. El Charco del Viento se encuentra en el municipio de La Guancha y se trata de un hermoso lugar formado a partir de antiguas erupciones volcánicas.
Estas erupciones volcánicas se enfriaron a su llegada al mar y quedaron en una forma bastante particular creando una especie de piscina natural. El Charco del Viento es una pequeña bahía, como si se tratase de una piscina, que se encuentra resguardada por dos rompeolas, por lo que uno se puede bañar tranquilamente, aunque, en ocasiones, es importante tener cuidado sobre todo cuando el mar está muy picado.
El Charco del Viento se ha convertido con el paso del tiempo en uno de los destinos favoritos de muchas familias. Además, debido a la fama con la que cuenta, cada vez son más los turistas que se animan a disfrutar del mismo debido a la experiencia que supone poderse bañar en un sitio así.
Básicamente es como si se tratase de una piscina con agua de mar, con la ventaja de que tiene unas vistas imposibles de igualar. El Charco del Viento es la fusión perfecta entre las erupciones volcánicas y el mar, un lugar en el que te puedes detener y relajarte con el paisaje.
El Charco del Viento es un lugar perfecto para todos aquellos que quieran disfrutar de algo más que un baño. Si te gusta practicar el snorkel o también quieres disfrutar de la pesca, el Charco del Viento es uno de los mejores lugares para hacerlo debido a la habitual tranquilidad de sus cristalinas aguas.
Cómo llegar al Charco del Viento
A diferencia de lo que sucede con otros charcos naturales en Tenerife, llegar al Charco del Viento es de lo más sencillo. Lo único que debes hacer es tomar la carretera TF-5 en sentido a Icod de Los Vinos. Cuando llegues al barrio de Santa Catalina deberás girar a la derecha en donde te indique la señal.
El Charco del Viento está muy bien señalizado, por lo que si vas por esa carretera no tendrás ningún problema en encontrarlo. Una vez que hayas encontrado el desvío seguirás por una carretera secundaria en la que rodearás varias plataneras hasta que llegues al parking.
Este parking se encuentra perfectamente acondicionado por lo que podrás ir cómodamente con tu coche al Charco del Viento. Por otro lado, también tienes la posibilidad de llegar al Charco en transporte público. En el caso de que decidas hacerlo las líneas de las guaguas te dejarán en la TF5 y luego deberás de realizar el camino hasta la costa andando.
Para elegir la línea adecuada, la que te deja cerca del destino, podrás elegir la 363, 107 y 108. Recuerda que el Charco del Viento no se encuentra completamente cerrado al mar, por lo que si el temporal no es el apropiado te recomendamos que dejes el baño para un día más tranquilo por tu seguridad.
